El pasado domingo 26 de mayo se celebró la 34 edición de la Carrera del Agua. Una carrera a la que fui en busca de algo más, donde me sentía con más fuerza que nunca, una carrera que presagiaba diferente.
Las cosas como son. Aunque no entrené debidamente, sabía que podía hacer algo bueno por el recorrido de la carrera y por la preparación del maratón, es decir, aprovechar las rentas jejeje.
Empecé con buen pie. Nada mas levantarme me sentí con ganas de correr. Mi primer tweet lo decía todo "Desayunando con la sonrisa de oreja a oreja. 26 de Mayo. Tenemos carrera :))))) A disfrutar
En seguida en Twitter los de siempre, todos los runners un domingo más madrugando para poder llevar a cabo nuestro credo. Todo preparado, bolsa, camiseta, zapas, porta dorsales y lo más importante, ese algo que recorría mi interior, que me hacía sentirme especial, único, invencible. Estaba convencido que sería un gran día.
Llegar a la salida con mi inseparable compañero Paco y ver un montón de buenos amigos, Gacela del Retiro, Manuel de zapas y calcetines, voltereta… y a mi Sensei a Alberto Barrantes. A correr al ropero y de nuevo camiones, como Mapoma. Uuufff miedo en el cuerpo, la sombra de Rumbao empezó a planear de nuevo en mi mente.
Con la ropa ya entregada Paco y yo nos pusimos a calentar bajo la batuta del Sensei. Sin duda fue idóneo, ya que aparte del magnífico calentamiento, también estiramos bien antes de empezar. Ese momento, fue clave porque desperté del letargo “mágico” y tuve que poner los pies en el suelo. Eso es así.
Concentración absoluta. Empecé a pensar en ese algo que buscaba y deseaba fervientemente. En el fondo buscaba la comunión entre cuerpo y mente haciendo que ambos se unieran en perfecta armonía, de la misma manera que puede sonar por ejemplo una pieza del grandioso Mozart. Buscaba la perfección al igual que el genio lo hacía con su música.
Running en estado puro, eso es lo que sentí el domingo en la carrera del agua. Me dejé cubrir por el mágico manto de la carrera y me refugié en lo que nunca te va a fallar, en ti mismo, en tus posibilidades. Siempre pensado en divertirse pero esta vez, buscando algo mas , luchar contra el crono, pulverizar antiguas marcas, sacar todo el potencial y aprovechar mi momento.
Ese día hice el mejor 10 Km de mi vida
Km 2 4'04''
Km 3 4'08''
Km 4 4'08''
Km 5 4'13''
Km 6 4'49''
Km 7 4'05''
Km 8 4'11''
Km 9 4'18''
Km 10 3'49''
Tiempo Neto oficial de la carrera 43'08''
Por eso cada vez que me pongo mis alas y salgo a volar doy gracias por ello. Ese momento es nuestro y solo nuestro. Una vez más sentí en mi interior que sin ninguna duda el running es una forma de entender la vida ¿O no es así?
Un abrazo;
@javier_alamo
Tweets por @javier_alamo
No hay comentarios:
Publicar un comentario