Ayer hizo un año y 8 días que decidí correr mi primer maratón y como ya os conté sobre mi como fue mi inicio a Mapoma esta vez fui yo el que animé a los de 10Km y luego a los de 21Km de citarse con Flípides el año que viene.
Quien me iba a decir a mi que este momento iba a llegar para mi. Ahora echo la vista atrás (más o menos unos 3 años y con unos 22 kilos mas) y no puedo creérmelo. Fijaros lo que voy a deciros, hasta a mi me cuesta reconocerme cada vez que veo fotos mías antiguas. Pero aquí estoy, con la ilusión de un niño y con un mensaje muy claro amigos: "La palabra imposible no existe. Querer es poder."
La gente dice, "un maratón que duro tiene que ser" pero no es así. Lo que es realmente duro es la preparación. Meses de trabajo y esfuerzo, de momentos buenos y no tan buenos. Mucho tiempo de dedicación que hay que robar a la familia.
Cuantos domingos madrugando, levantádote sin hacer
ruido y utilizando el móvil de linterna, poniéndote las zapas y la ropa casi a oscuras para salir para ir a correr, porque tenemos o tirada larga o carrera. Que diferentes son los domingos para un runner ¿verdad? Para nosotros son sagrados.
Algo más de tres meses donde tu mente y tu cuerpo se preparan para entregarse a la prueba mas dura y a la vez tan apasionante como son los 42 Kilómetros y 195 metros. Todo esto y un plan de entrenamiento seguido a raja tabla que me ha llevado hacer 660
kilómetros repartidos desde mitad de enero en diferentes entrenamientos. Muchas cuestas, tiradas largas, cambios de ritmo y las series o mas conocidas como las "putas series". Hasta que conseguí hacerlas como tiene ser jejeje. Pero sinceramente como me han hecho mejorar.
Pero lo que realmente me ha hecho mejorar ha sido el grupo humano que hemos formado. No solo somos un equipo, somos amigos y nos divertimos con nuestra pasión y encima hacemos una labor social gracias a nuestro proyecto #KmsXAlimentos de lo que estoy sinceramente orgulloso. GRACIAS AMIGOS!!!
Todo esto me ha llevado a pensar que lo que es duro es la preparación y la carrera en sí. El día del maratón es el premio a ese esfuerzo y a ese trabajo. Un premio que puede ser el mas dulce o el mas amargo. Un premio que dictará sentencia y se encargará de ponernos en nuestro sitio. Por eso, el maratón es mágico y te atrapa en sus fauces y ya no te soltará jamás. A pesar de tener los músculos doloridos, yo ya estoy pensando en el próximo. Esto es así, no podemos evitarlo.
Querer es poder. Si realmente deseas algo, sueñas con ello, no lo dudes, ve a por ello, "Soñar con el éxito es bueno, pero realizarlo es mejor."
El domingo cumplí mi sueño, me convertí en maratoniano. Crucé esa meta con los brazos en alto y grité, vamos que si grité. Jamás olvidaré las diferentes sensaciones que experimenté y como las lágrimas brotaban de mis ojos como un niño, lágrimas de felicidad y de agradecimiento mientras me abrazaba a mi familia y a mis amigos. El maratón dictó sentencia y me permitió participar de su magia. La vida es maravillosa, de verdad que lo es...
Un abrazo;
Tweets por @javier_alamo
¡Qué razón tienes en cada una de tus palabras! Javier Álamo, describes perfectamente lo que es un maratón y el influjo que ejerce en cada uno de los que lo corremos. ¡Enhorabuena, por cruzar la meta, por conseguir tu sueño y por desear que esto vuelva a pasar otra vez! Un beso enorme.
ResponderEliminarMuchísimas gracias!!!! Ya me estoy planteando si la próxima será Valencia. Deseando volver a compartir cita con Filípides ;-)
EliminarEnhorabuena Javier!!!
ResponderEliminarPero no solo por acabar la maratón (que tiene muchísimo mérito), sino por todo la evolución que has sufrido y todo el esfuerzo, entrenamiento y sacrificio previo que te ha llevado ha acabarla.
Con tu permiso te agrego a mi lista de blogs y me quedo por aquí para seguir tus evoluciones.
Un saludo
Muchas gracias amigo!!!! Un verdadero placer y honor que sigas mi blog. Yo estoy aterrizando en el mundo de Blogger.
EliminarHe visto el tuyo y he leido tu carrera de la Biosfera Trail y uuufff IMPRESIONANTE ;-)
Nos leemos!
Un saludo.